sábado, 1 de diciembre de 2012

DIEGO TORRES: ESE MISERABLE PERIODISTA DEPORTIVO.....




Cuando no era tan visible el periodismo tóxico, carroñero y antimadridista, este infame "periodista" empezó a publicar en su periódico El País (diario del que siempre he estado muy alejado ideológicamente, pero que en algunas ocasiones caía en mis manos) unas "informaciones" y artículos absolutamente increíbles, en contra del Madrid, cuyas notas características eran la falta de rigor profesional, la falta de ética periodística y el deseo obsesivo de hacer daño al Madrid.

Este sinvergüenza del periodismo deportivo fue el precursor e iniciador de esa caza salvaje llamada Real Madrid, a la que, posteriormente, se unieron en tropel toda esa caterva de indeseables juntaletras, por algunos, llamados periodistas y que han hecho de su razón de ser "profesional" y "periodística", el ensuciar, enfangar y desestabilizar el buen nombre del Real Madrid, convirtiendo en una suerte de profesión al uso, el despellejamiento continuo y diario del Madrid sin ningún motivo aparente. La profesión de moda de esta morralla de periodistas deportivos. Simplemente porque sí. Simplemente, por hacer daño.

Ocurrió que a este peligroso y desvergonzado juntaletras, nadie le paró los pies, ni en su diario, ni, por supuesto, el Madrid, que como siempre no movió un dedo ni protestó, supongo que por aquello del señorío y del aceptar las críticas que le llegasen, aunque eso supusiera tragarse toda una serie de bestialidades, sinvergonzonerías y golfadas  y, claro, la cosa fue a más, y a más, hasta convertirse esta basura del periodismo deportivo en una fuente inagotable de invenciones, mentiras y vilezas.

El problema es que a esta mugre del periodismo deportivo nadie le ha parado los pies de una puta vez, nadie le ha enseñado los dientes y las garras, y esa manga ancha le ha permitido a este rastrero, dar rienda suelta al periodismo deportivo más pestilente, sucio y pútrido conocido jamás.

Como he mencionado antes, esta bazofia de periodista, no se ha contentado nunca con esa increíble falta de rigor profesional y ética periodística. No. Le ha añadido un plus de crueldad, maldad y vileza en sus "informaciones" sobre y contra el Madrid, que debería ser estudiado en las facultades de periodismo del mundo de lo que no debe hacer nunca un periodista que se precie de serlo. El único afán y deseo obsesivo de este desgraciado, es hacer daño al Madrid, alcanzando sus "informaciones" e invenciones, altas cotas de paroxismo intelectual, cuando no, de patología médica.

Si existiera un mínimo de decencia en el mundo del periodismo en general, y en el del deportivo, en particular, a esta porquería del periodismo le deberían retirar el carnet de periodista, si es que lo tiene, cosa que dudo, muy mucho.

Por culpa de infames periodistas de esta calaña, la culpa de la caída en ventas de un diario y, en concreto, del diario donde trabaja el susodicho, tiene mucho que ver. Esto es así y no hay que darle más vueltas. Mucha gente que a lo mejor compraba ese diario, ha dejado de hacerlo, únicamente por culpa de este engendro del periodismo, porque mucha gente no está dispuesta a leer porquerías, basura e infamias del equipo de sus amores y ver cómo a ese equipo, en este caso el Madrid, se le vilipendia, se le insulta, se le veja y se le atiza día sí y día también sin ninguna razón, por este personaje pusilánime, vil e inmoral del periodismo. Esto funciona así.

El problema con que se encuentra el miserable este es que ya hay mucha gente harta y que no está dispuesta a pasarle ni una. Cada vez que intente hacer daño al Madrid porque le salga de los cojones, va a tener enfrente a los madridistas auténticos y de verdad para enseñarle los dientes y pararle los pies.

Que sepas, querido Dieguito, que muchos te estamos vigilando y no estamos dispuesto a consentir que sigas haciendo daño gratuitamente, atacando sin piedad, inventándote noticias para desestabilizar, desprestigiar y denigrar a un equipo, EL REAL MADRID, que por si no lo sabías es EL MEJOR EQUIPO DEL SIGLO XX Y EL MEJOR EQUIPO DE LA HISTORIA DE UN DEPORTE LLAMADO FÚTBOL.

Un respeto, gañan.














Javier Muñoz Bargueño







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